Si ya es jodido pasar la noche bajo un puente de esta eciudad, “no digo naaa” de lo difícil que resulta pasar unas horas escondida detrás de un sofá y con la vejiga a punto de reventar.
Anoche no llevaba ni diez minutos en el despacho de mi ejefe cuando de golpe oí pasos en el pasillo y voces detrás de la puerta.
Tuve que reaccionar rápido, igual que cuando me meto en una emboscada y quiero salvar el pellejo, así que corrí a esconderme detrás del sofá que, por suerte, está pegado a una de las paredes de la oficina.
Se abrió la puerta y allí, agazapada como un conejo, sólo oía los latidos de mi corazón y las risotadas de unos cuantos tipos.
HORROOOOOOOR! TIMBA DE PÓKER!!!!!!!
http://img443.imageshack.us/img443/6938/timba.jpg
Pero vamos a ver… si el torneo de póker estaba previsto para hoy por la noche ¿por qué esta putada de reunirse allí para entrenarse? ¿Qué le pasa a mi ejefe, no quiere ensuciar su casa?
Opté por relajarme y concentrarme (lo mismo que cuando quiero pasar desapercibida en las trincheras los días que nos toca ir a una de las misiones inútiles a las que nos envían los admin de eR para que no pensemos y controlarnos mejor). Al fin y al cabo voy vestida de cuero negro (menos mal que no me había quitado la ropa!), con suerte ni se dan cuenta – pensé.
Aparte del humo y las conversaciones machistas que escuché, también me petaron los oídos con algunas canciones de Ramsteim (por lo visto mi ejefe es heavymetalero). No digo que no me gusten, por ejemplo ésta es una de mis preferidas:
Mientras pasaba el tiempo escuchaba las voces. Una de ellas era la de mi ejefe. Sin embargo hubo otra que también reconocí: la del informático loco que alguna vez ha venido a mi terminal para solucionar algún problema que, al final, se arreglaba solo. Yo creo que este informático provocaba el error desde su terminal para así venir a hablar un rato conmigo de música. Por cierto, una vez me pasó una preciosa canción de Sting a mi móvil.
Hubo un momento que me dio un vuelco el corazón porque uno de los jugadores dijo:”saca Ballantines” y ví que justamente al lado del sofá estaba el minibar. Empecé a sudar bajo mi mono de cuero negro y a notar que la presión en mi vejiga era ya insoportable…. pero nadie se movió de su sitio. Al rato descubrí que ese era el nombre de uno de los jugadores. Y al rato también comprobé quién de ellos era porque, ya cansados de jugar, el tipo se levantó y se dejó caer a peso en el sofá…. Casi me revienta la cabeza al chocar ésta contra la pared. Medio aturdida y con unas ganas terribles de mandarlos a la mierda e ir a mear, oigo a mi ejefe decirle que tenga cuidado con su sofá pues para él tiene un significado especial y noto cómo el tipo se pone a olisquear mientras dice: es que este sofá mola mazo… y huele a hembra!
Doy gracias a mi ejefe por considerar que ya era tarde y echar literalmente a todos esos tipos del despacho. No sé qué habría pasado si llegan a quedarse un poquito más!
El caso es que cuando ya apagó las luces e iba a cerrar la puerta, volvió la mirada hacia el sofá y me lanzó una sonrisa de complicidad, la misma que se puede apreciar en su foto.
Luego cerró y yo, por fin pude sentar mis posaderas en la taza del baño… Un alivio indescriptible.
Después de la noche que he pasado, esta mañana he tomado la determinación de comprarme un billete para Barcelona, tengo stress… quiero visitar viejos amigos, dormir en una cama mullida, ver cosas…. La Barcelona de este emundo no tiene hospital, pero a diferencia de eMadrid, tiene playa, “desitjo tant trepitjar la sorra de la platja”. Además, mañana es Sant Jordi, quiero pasearme por las eRamblas, y disfrutar del ambiente floral y hojear libros con mis propias manos, no ojear artículos en una pantalla de ordenador.
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